Áreas de Práctica: Delitos Menores
Los delitos menores fueron conocidos en derecho como actos criminales menores. Aunque los delitos menores son infracciones mucho menos graves que los delitos criminales, las condenas por cargos de delito menor pueden tener serias implicaciones. Si una persona es condenada de un cargo regular por conducir bajo la influencia (DUI), esa condena permanecerá en el expediente de esa persona para siempre. El DUI también será una parte permanente del expediente de conducción y causará que las cuotas de seguro se disparen al cielo. Otras condenas por delito menor tales como posesión de marihuana y hurto menor, pueden impedir que un individuo pueda convertirse en ciudadano de EUA, o aun peor, detonar los procedimientos de deportación. Una condena por posesión de marihuana también implicará una suspensión de dos años de la licencia de conducir. Los delitos menores son infracciones penadas con hasta un año en la cárcel del condado. Aunque la cárcel no es un resultado típico, las otras consecuencias negativas de una condena por delito menor requieren la contratación de los abogados penalistas de DMT en Miami para defender los cargos y evitar muchas de las consecuencias imprevistas que representa un cargo por delito menor en su expediente.
Vandalismo
El vandalismo puede ser fincado tanto como delito menor o mayor, dependiendo de la cantidad de dólares que cueste el daño a la propiedad. Para que una persona sea acusada por vandalismo, la fiscalía debe probar que el acusado dañó o deterioró una propiedad; que la propiedad pertenece a una persona; y que el daño fue causado intencional y maliciosamente. Si el daño causado vale menos de USD $200, se fincará un cargo por delito menor en segundo grado. Si el daño cuesta entre USD $200 y $1,000, se fincará un delito menor en primer grado. Si el daño sobrepasa USD $1,000, se fincará un cargo por delito mayor en tercer grado. La mayoría de los cargos por delito menor son el resultado secundario de un cargo primario. Por ejemplo, si una persona ingresa a un hogar a robar forzando la entrada y causando daños a la puerta o a la ventana, no solamente se le acusará de delito de allanamiento de morada, sino que el estado también le fincará el cargo de delito menor criminal como resultado del daño a la puerta o ventana.
Conducta Escandalosa
La conducta escandalosa existe cuando una persona comete un acto, o actúa de manera que corrompe la moral pública, escandaliza el sentido de decencia pública, afecta la paz y tranquilidad de otros que atestiguan los actos, pelea o escandaliza, o constituye una violación a la paz. El estatuto, aunque es sencillo a primera vista, es difícil de probar en la corte. La mayoría de los reportes de la policía indican que las acciones de un particular acusado provocaron que se juntara una multitud. Las cortes de apelación de Florida han especificado que una multitud reunida no constituye una violación a la paz. Muchos turistas y vacacionistas son acusados de este delito por oficiales de policía demasiado celosos de su deber. En la mayoría de los casos, los hechos imputados por los oficiales no llegan al delito de conducta escandalosa. Los abogados penalistas de DMT han alegado exitosamente y ganado mociones para desestimar los cargos en beneficios de sus clientes.
Escándalo por Intoxicación
El escándalo por intoxicación es otra infracción en la que la policía local disfruta arrestando a turistas y vacacionistas. Igual que la conducta escandalosa, el escándalo por intoxicación es un cargo difícil de probar en el juzgado. El escándalo por intoxicación se comete cuando una persona se intoxica hasta el punto de que la seguridad de las personas o propiedades son puestas en peligro, o una persona está intoxicada en un lugar o transporte públicos hasta el extremo de que provoca un desorden público. El estado rara vez puede probar que la conducta de una persona creó un desorden público. Adicionalmente, los oficiales de policía no llevan a cabo ejercicios de sobriedad en el lugar lo que hace difícil probar el elemento de intoxicación.
Resistir a un Oficial Sin Violencia
Resistir a un oficial sin violencia es una infracción que usualmente es fincada junto con otro delito. Una persona comete la infracción al resistirse, obstruir u oponerse a un oficial de policía en el ejercicio de sus funciones. Un caso típico de resistirse a un oficial sin violencia ocurre cuando un individuo se rehúsa a ser esposado o huye a pie de los oficiales de policía. Sin embargo, si el oficial lleva a cabo un arresto ilegal que está fuera de la jurisdicción de sus funciones, se puede presentar una moción para desestimar el cargo y ganar ante la corte.
Incitación a la Prostitución
Una popular, pero asimismo humillante infracción es incitar a la prostitución. La incitación a la prostitución sucede cuando una persona ofrece, u ofrece consentir en un trato, a otra persona con fines de cometer prostitución u otros actos lascivos e indecentes. También representa una violación a la ley de Florida, recibir u ofrecer recibir a cualquier persona dentro de una estructura, lugar, edificio o terminal con el propósito de cometer prostitución. Una primera o segunda infracción por incitar a la prostitución es un delito menor, sin embargo, una tercera infracción subsiguiente puede de hecho ser clasificada como un delito grave en tercer grado.
Allanamiento
Una persona comete allanamiento al ingresar intencionadamente en una estructura, transporte, o morada sin el intento de llevar a cabo un delito una vez adentro. Todos los delitos por allanamiento se consideran menores con la excepción de cuando alguien comete allanamiento portando un arma de fuego u otra arma mortal. Si ese fuera el caso, el estado puede establecer un delito grave en tercer grado.
Si usted o alguien que conozca ha sido arrestado y acusado de un delito menor de cualquier clase, contacte a los abogados penalistas de DMT en Miami. Un abogado penalista experimentado está disponible todos los días del año, 24 horas al día para hablar con usted en relación a su caso. Denos la oportunidad de ayudarle a proteger sus derechos y defender su caso. Puede llamar a nuestro despacho al (305) 396-3982 o ponerse en contacto con nosotros llenando el formato en nuestra
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